"Egoísmo"

Este post lo he titulado Egoísmo, pero podríamos buscarle el sinónimo  "la etapa del mío".

Como decía el psicólogo Piaget, hasta los cinco años los niños no son capaces de ponerse en el lugar de los demás, por lo tanto en vez de llamarlo egoísmo, deberíamos llamarlo "egocentrismo"... se sienten el centro del mundo, por lo tanto todas las experiencias y objetos se refieren a su propio yo

El <<mío>> es una de las primeras palabras que dicen, que como he comentado en otros escritos, le ayudan a reafirmar su personalidad y como también os dije "no son conscientes" de las consecuencias negativas que esto deriva de cara a los demás.

Que buena actriz es ;)

Podríamos decir que al año y medio aproximadamente, empiezan a separarse a si mismos del mundo y de mamá. (Les cuesta mucho distinguir sus cosas de la de los demás) pensad que todos los objetos que entran en su campo de "acción" son suyos ya sea un juguete, el bolso de mamá o el periódico de papá....

A los dos años, reconocen lo que es suyo y lo defienden a toda costa, todos los objetos tienen un valor muy especial para ellos y por lo tanto, en el momento que lo adquieren, se convierten en suyos y de nadie más. 

Podríamos decir que es un instinto de posesión completamente normal en su desarrollo, que le permiten manifestar sentimientos muy fuertes (reafirmando su personalidad) y si se les quita, aparece la desesperación.... por que sienten que se les priva una parte de él.

A los tres años... aún no entienden que lo prestado, tienen que devolverlo, pero podemos trabajar esto mediante un "ritual o rutina" y así "resolver" mejor las situaciones conflictivas. 

Pensad que carecen de noción del tiempo y son incapaces de entender "el después" si no lo hacemos siempre o casi siempre de la misma manera .... por ejemplo:

Si está vuestro hijo con un amiguito y éste quiere el juguete que tiene vuestro hijo, debéis de explicarle que hay que dejarle un poquito (al principio con 1 o 2 segundos basta) al amigo y luego se lo devolverá. 

Es importante que el tiempo, al principio sea poquito, así lograremos hacerle ver que es cierto lo que le estamos diciendo.(es muy importante cumplir lo que decimos)  Y seguir el mismo mecanismo con el "amigo". También podemos ofrecer otras alternativas de juego.....por ejemplo: Cuando suene la campanilla cambiaremos de juguete, y así estamos enseñándoles a compartir pero de una manera más sutil "a través del juego".

Lo que conseguimos mediante las rutinas o rituales es que el niño sea capaz de anticiparse a los hechos (por lo tanto lo situamos en el tiempo) y se mostrará mucho más tranquilo y seguro ante la situación.

Todo esto les ayuda a relacionarse y aprender los límites del "mío" y "tuyo" que le permiten formar una personalidad más autónoma.

Y para terminar, os recomiendo que ante las peleas entre dos iguales, intentéis que lo resuelvan ellos solos, ya que, están en igualdad de condiciones, y los adultos siempre acabamos de-cantándonos  por uno de los dos. Y recordar que  podemos ofrecerles otras alternativas de juegos! no todo debe centrarse en un objeto concreto...podemos desviar la atención a otra actividad.